El presidente Joe Biden está extendiendo la pausa en los pagos de préstamos estudiantiles federales mientras la Casa Blanca lucha en los tribunales para salvar sus planes de cancelar partes de la deuda.
El presidente tuiteó la noticia el martes por la tarde. El secretario de Educación, Miguel Cardona, extenderá la pausa de pago a más tardar el 30 de junio de 2023, dijo Biden, lo que le da tiempo a la Corte Suprema para escuchar el caso en su mandato actual y emitir un fallo.
La pausa de pago de la era de la pandemia expiraba el 1 de enero, una fecha que Biden fijó antes de que su plan de cancelación de deuda se estancara ante los desafíos legales de los opositores conservadores.
Ahora se extenderá hasta 60 días después de que se resuelva la demanda. Si la demanda no se ha resuelto antes del 30 de junio, los pagos se reanudarían 60 días después.
El plan de Biden promete $10,000 en la condonación de la deuda estudiantil federal a aquellos con ingresos de menos de $125,000 o a los hogares que ganan menos de $250,000. Los beneficiarios de la beca Pell, que generalmente demuestran una mayor necesidad financiera, son elegibles para un alivio adicional de $10,000.
El Departamento de Justicia solicitó a un tribunal de apelaciones que anule una decisión del juez del Tribunal de Distrito de los Estados Unidos, Mark Pittman, que anuló el plan de Biden. Pittman, quien fue designado por el expresidente Donald Trump y tiene su sede en Fort Worth, Texas, dictaminó que el plan de Biden sobrepasa su autoridad presidencial y usurpa los poderes del Congreso para hacer leyes.
Surgió de una demanda presentada por dos prestatarios que no son elegibles para el alivio según los parámetros del plan de Biden. El programa fue detenido por separado por un tribunal de St. Louis después de que seis estados liderados por republicanos dijeran que dañaría a las instituciones financieras. La administración de Biden indicó que planea apelar el caso ante la Corte Suprema.
Casi 26 millones de personas ya han solicitado el alivio, con 16 millones aprobados, pero el Departamento de Educación dejó de aceptar y procesar solicitudes después de que el plan fuera declarado ilegal.
El plan de Biden ha generado una serie de desafíos legales, que han tenido resultados mixtos. Quienes se oponen a la condonación de la deuda han pedido a la Corte Suprema que intervenga al menos dos veces después de que sus casos fracasaran en los tribunales inferiores. El Tribunal Supremo rechazó ambas solicitudes.
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